Conozcan ahora a Santa Rosalía

MARTES, 30 DE JULIO DE 2013 00:44

ESCRITO POR YASMIN CONYEDO RIVERÓN

Cuba actualidad, Santa Clara, Villa Clara, (PD) En la parte alta de su puerta principal reza una inscripción: "Santa Rosalía. Escuela gratuita para niños pobres. Fundada por Da. Rosalía Arencibia de Abreu y sostenida por sus hijas. 1884". Una de las tantas contribuciones realizadas en la ciudad de Santa Clara a favor de los pobres.

A tantos años de fundado, este inmueble atesora una rica historia desconocida por los cubanos, pues no solo la ilustre señora Martha Abreu de Estévez contribuyó a la causa de los más necesitados.

Este lugar, a pesar de encontrarse en la parte céntrica de la ciudad, permaneció por más de dos décadas en total abandono. Sus espacios fueron refugio de vectores como roedores y mosquitos. También se convirtió en servicio sanitario para los apurados, y fue posada para quienes no tenían donde compartir su intimidad. Ante el reclamo popular, el Gobierno decide convertirlo en un nuevo centro gastronómico en divisas y así atraer al turismo.

Santa Rosalía, que permaneció por tantos años en ruinas, fue convertido por obra y gracia de la ingeniería civil en un hermoso y acogedor lugar. Su estructura interna fue modificada completamente. Se conservó solo la fachada, por estar situado en el centro histórico de la ciudad, a un costado del emblemático Teatro de La Caridad.

Su hermoso diseño colonial lo distingue entre otras tantas edificaciones, tanto modernas como de su época. En su interior puede apreciarse un espacioso salón muy bien iluminado por lámparas, que aunque modernas, denotan cierto estilo colonial, dándole un toque acogedor al lugar.

Sus sillas y sus mesas, perfectamente ubicadas y adornadas con finos manteles, y el personal, de impecable uniforme típico y trato esmerado, hacen sentir bien a quienes pueden costear el servicio, que incluye cocteles variados y exquisitos platos donde no faltan diversas carnes. El único inconveniente es que todo se paga en divisas (moneda convertible), lo cual hace entender que es un lugar selecto y privilegiado.

¿Cuántas obras de caridad han sufrido en el transcurso del tiempo tales transformaciones? ¿Con qué fin son hechas, a favor de los pobres o de la alta burguesía? Son preguntas que se hacen muchas personas indignadas.

No pocos admiran desde lejos la nueva maravilla creada, pues la falta monetaria en sus bolsillos les impide la entrada e inunda de tristeza sus almas. Es por ello que en las calles de Santa Clara muchos dicen, afligidos: "Conozcan ahora a Santa Rosalía".
Para Cuba actualidad: conyedoy@gmail.com
Fotos: Yasmin Conyero