MIÉRCOLES, 06 DE NOVIEMBRE DE 2013 00:29
Cuba actualidad, Arroyo Naranjo, La Habana, (PD) "El futuro de la niñez", así tituló un artículo del pasado 11 de octubre el diario oficial Granma, órgano de prensa portavoz del Partido Comunista (único).
La periodista contrastó los asesinatos múltiples, explotación, secuestros o prostitución, venganza, de los que son víctima millones de niños en el mundo. Recalcó que "otra realidad se configura para los niños que nacieron en este archipiélago".
Cuba ratificó en 1991 la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño. "Ya para esa fecha contábamos con el Código de Familia, una Constitución y el Código de la Niñez y la Juventud", según Granma.
El Estado cubano debe compatibilizar su legislación interna con lo que establece la Convención de los Derechos del Niño. También debe crear una estructura adecuada para protegerlos, principalmente del maltrato infantil, en especial a aquellos que se encuentran en condiciones de internamiento.
La ley cubana permite a los padres reprender y corregir adecuada y moderadamente a los hijos bajo su patria potestad, sin especificar o describir dichos términos. Igual potestad confiere a los centros de reeducación para menores con trastornos de conducta. Tampoco se vela por que los padres obligados a alimentarlos cumplan de forma efectiva con su deber cuando no conviven con ellos.
Merece atención la situación de la justicia para los menores cubanos. En Cuba, la justicia de menores se imparte extrapenalmente por el Ministerio de Educación y el Ministerio del Interior, a menores de hasta dieciséis años con trastornos de conducta o que participen en hechos delictivos.
Los menores que cometan delito, al cumplir los dieciocho años, pueden ser internados en una prisión de mayores hasta cinco años, sin ser procesados por un tribunal. Es obligatorio el internamiento de los menores en escuelas de conducta sin considerar el criterio de los padres y no pueden apelar en caso de inconformidad con la medida.
El Gobierno cubano debe instituir tribunales especializados para los menores que violenten la ley y procesos judiciales en que se respeten las garantías del debido proceso, como el derecho a un juez natural, a la presunción de inocencia y a la defensa.
Puede ser que algunos encuentren efectiva la estrategia de amplificar y divulgar los peores sucesos del mundo. Así los problemas propios parecen más simples. No vale ignorar la existencia de un futuro cada vez menos seguro para los niños.
Para Cuba actualidad: yaremisflorez@gmail.com
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