Un pueblo de Francia quiere contratar médicos cubanos

El concejal de la localidad de Privas pacta una entrevista con la Embajada de Cuba para hacer la solicitud.

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DDC

París 11 Oct 2019 - 01:45 CEST

Maternidad de Privas. FRANCE 3

La localidad de Privas, del departamento francés de Ardèche, solicitará a La Habana el envío de personal médico para reabrir su sala de maternidad, clausurada debido a la carencia de galenos.

El concejal local Francois Jacquart, miembro del Partido Comunista de Francia, ha organizado una entrevista con la Embajada de Cuba en ese país para hacer formal la solicitud de envío temporal de los profesionales necesarios, reportó el medio francés France Bleu.

Laurent Wauquiez, presidente de la región Auvergne-Rhone-Alpes, interpeló a la ministra de Salud francesa, Agnès Buzyn, exigiéndole cumplir con su palabra de reabrir la sala de maternidad de Privas.

Laurent Wauquiez

✔@laurentwauquiez

La maternité de Privas doit continuer de fonctionner. Service public essentiel, elle poursuivait une mission dont nous avons besoin.
Je demande à la Ministre de la Santé de prendre ses responsabilités.

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4:31 - 7 oct. 2019

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En un vídeo en Twitter, Wauquiez pidió a la titular encontrar un mecanismo para llevar a su municipio los profesionales necesarios y permitir que se instalen en ese territorio, después de que esta asegurara en abril pasado que habría una solución para esa situación.

Ante esa situación, Jacquart recomendó a Wauquiez considerar la idea de los cubanos. "Finalmente, ¿está listo el presidente Wauquiez para seguirme y traer médicos cubanos a Ardèche?", escribió en Twitter.

Privas, al sureste del país y con poco más 8.000 residentes, sería el segundo territorio francés en acoger a médicos cubanos, después de que en julio pasado el parlamento de ese país aprobara que sus territorios de ultramar contrataran servicios profesionales de la Isla o de otros de fuera de la Unión Europea.

En 2018, los cubanos en "misiones de salud" de La Habana ascendían a unos 55.000 en 67 países. Ese año, según cifras oficiales, aportaron a las arcas del Estado 6.400 millones de dólares, muy por encima de los más de 1.300 millones ganados por concepto de "servicios de soporte", la segunda fuente declarada de ingresos del país, que incluye asistencia a embarcaciones y aviones, entre otras prestaciones.

El régimen se queda con al menos el 75% de lo que pagan los países de destino a esos profesionales en salarios que deberían recibir los médicos.