Periodista, Cubanet. aconte1812@aol.com
Por Antonio Conte
Ni el cielo en el color de la bandera
ni el rocío alumbrando la sabana
ni el mar en el umbral de la ventana
ni las noches de abril, ni tan siquiera
el laurel, la ridícula palmera
con su oscura barriga de campana
la ceiba en algún parque de La Habana
donde una novia solitaria espera.
Es ajeno el paisaje que me asalta;
Esa luna brutal, estrellas altas,
puertas cerradas a mi amor, el eco
del mundo litoral que me rodea.
Cuba no es mi país, como no sea
mi propio corazón parado en seco.
(Del libro “Definición del humo”).
ACONTE1812@aol.com
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