Ana Margarita Perdigón Brito
La Habana, Cuba – www.PayoLibre.com – La vida de un miembro del Grupo de los 75 corre peligro por no existir en el penal condiciones para los padecimientos que presenta.
Alfredo Domínguez Batista, prisionero de conciencia del Grupo de los 75, se encuentra recluido en el penal Típico Viejo de Las Tunas, condenado a 14 años de prisión, y el próximo día 18 habrá cumplido la mitad de su sanción.
El pasado día 13, su esposa, la dama de blanco Melba Santana Ariz, denunció en La Habana que la vida de su marido corre peligro, pues él sufre de gastritis atrófica descompensada con sangramientos, hernia hiatal y otros padecimientos incompatibles con el régimen carcelario.
Melba comunicó: “El pasado jueves recibí llamadas telefónicas de 4 presos comunes informándome de la gravedad de Alfredo, quien está vomitando sangre y sufre dolores tan fuertes que se revuelca en el piso”.
Y añadió la dama de blanco: “Hace cosa de un mes, el mayor Juan Carlos, de la Seguridad del Estado, me dijo que yo estaba autorizada para llevarle a Alfredo la leche, viandas, cereales, frutas, verduras, carnes y pescado que él necesita; pues en la cárcel no hay condiciones para suministrarle la dieta requerida”.
Santana Ariz se pregunta: “¿Cómo voy a llevarle esos productos frescos a mi marido, si vivo a decenas de kilómetros del Típico Viejo? ¿Por qué no lo liberan si su vida está en peligro y ellos mismos reconocen que no hay condiciones para mantenerlo encarcelado?”
Agencia Yayabo Press.
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