miércoles, 7 de abril de 2010

No caerá este árbol en el bosque de la indolencia


No caerá este árbol en el bosque de la indolencia
Enviado por ei en Abril 7, 2010 – 20:00 pm.Frank Rodríguez

Franklin Pelegrino del Toro dejó su huelga de hambre de 40 días. La mayor parte de su huelga la pasó sin que muchos lo supieran, solo, en el sentido más estricto de la palabra.

Me alegra mucho la decisión de Pelegrino. Girando la mirada hacia Fariñas tenemos que ver todos los obstáculos que se interponen entre él y su meta final, morir por nosotros los cubanos:

1.El instinto de supervivencia.
2.El hambre
3.La sed
4.Los consejos de sus familiares y amigos.
5.Los dolores de cabeza.
6.Los dolores en las articulaciones.
7.Los mareos y desmayos.
8.Los temblores y escalofríos.
9.La fiebre.
10.El tedio y total falta de comodidad.
No hay nada que culparle a Pelegrino del Toro, hizo lo que pudo por protestar las injusticias que tienen que aguantar los cubanos. Qué bueno que podrá vivir para ver el fin de estas injusticias.

Fariñas debe abandonar su huelga. No por ninguna de las diez razones de arriba, debe abandonarla porque su genio y lucidez nos es indispensable. Su genio fue crear una situación en la que el régimen no podía hacerle daño, o sea, más daño del que él ya asumía. Su lucidez, en medio de fuertes dolores de cabeza, es poder guiar su huelga por los caminos de los medios internacionales pudiendo comentar día a día las reacciones de sus amigos y enemigos, logrando que su mensaje saliera con claridad al mundo.

Personas tan excepcionales como Fariñas no nacen todos los días. Su ejemplo conmovedor servirá de acicate a todos los que vengan detrás de él, vivo o muerto, pero él cree que sólo muerto puede ser convincente. Se parece a Martí, que de no haber entregado su vida hubiese quedado mal ante el choteo cubano, ese mal que tanto daño nos hace.

Es necesario que Fariñas y el Dr. Darsi Ferrer abandonen sus huelgas y se unan al Dr. Oscar Elías Biscet, amante de la vida, desde su comienzo hasta el final. Yo no necesito que mueran, ya sé que la honestidad y hombría de ellos pueden vencer el hambre. Y como la Patria es de todos, tampoco podemos perder a Félix Bonne Carcassés.

Vive Zapata, viva Fariñas y Ferrer y descanse por unos días Franklin Pelegrino del Toro.

-FOTO: Franklin Peregrino: efe

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