Amado Gil
(Radio Martí, 25 de mayo) - Un prisionero de conciencia cubano afirmó desde la cárcel que no acepta la libertad, si está condicionada a que las Damas de Blanco y las de Apoyo dejen de manifestarse públicamente en las calles de la isla.
El prisionero del Grupo de los 75, Ángel Moya Acosta, dijo por otro lado desconfiar de la buena voluntad del gobierno comunista del general Raúl Castro, en estas negociaciones con la Iglesia Católica que podrían terminar con la libertad de algunos presos políticos.
Ángel Moya Acosta, condenado a 20 años de cárcel en la Primavera Negra de 2003, dijo que el único objetivo del régimen de la isla es sacar de circulación a las Damas de Blanco y a las de Apoyo, y definió la maniobra como algo infame.
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