

Ya el ministerio cubano no sabe adonde esconder la cara, su reputación desacreditada internacionalmente, al hacer declaraciones de que en sus cárceles nunca han fusilado ó torturado a nadie.
Con la muerte del prisionero político Orlando Zapata Tamayo, las golpizas a las Damas de Blanco; el caso, de huelga de hambre, de Guillermo Fariñas Hernández y, el último caso de la excarcelación de Ariel Sigler Amaya, exponiendo una imagen que ha recorrido el mundo como un relámpago, demostrando una vez más las atrocidades que han tratado de ocultarle al mundo por más de medio siglo, de que sí, son reales las denuncias en su contra. Declarando como hipócritas y engañosas la participación de los representantes de la dictadura al firmar La Carta Universal de los Derechos Humanos en Las sedes de Las Naciones Unidas y, demostrando claramente una indiferencia por los artículos planteados en dicha cédula.
El robo, los engaños, asesinatos y mentiras han sido tan notorios, que ésto ha obligado al mundo a preguntarse las siguientes preguntas:
1) ¿De dónde Fidel Castro consiguió el dinero para poder amasar, en una cuenta personal, guardado en el Banco del Vaticano, una fortuna de más de 1,600,000.000.00 millones de dólares? Convirtiéndose así en la clase social más vil que pretendió eliminar de Cuba, ' La Burguesía'.
2) ¿Porqué tuvo que morir Orlando Zapata Tamayo y los miles de cubanos víctimas de ese enorme sistema carcelaria?
3) ¿Cuáles son las razones para no ir a unas elecciones, libres y democráticas, si por décadas
le han presentado un panorama utópico al mundo entero? ¿ A qué temen?
Estas son pero algunas de las miles de interrogantes que se harán el pueblo de Cuba y el mundo, porqué le han ocultado la verdad al mundo entero cuando las pruebas están evidente.
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