29 de Julio del 2011
El gobernador de Puerto Rico, Luis G. Fortuño, convirtió en ley un proyecto con el fin de extender la licencia de maternidad y paternidad en los casos de adopción de niños mayores de seis años.
Con este proyecto "aumentamos los beneficios para estas familias. Con la extensión de esta licencia, tanto los padres adoptivos, como los niños, tendrán mayor tiempo para acoplarse a sus nuevas familias y lograr que la adaptación inicial sea saludable", explicó Fortuño.
La nueva ley cumple con lo siguiente: 1) los padres que adoptan niños de 5 años o menos recibirán una licencia de quince días (actualmente sólo la madre cuenta con este beneficio, que consiste en ocho semanas); 2) la licencia para madres y padres que adoptan niños mayores de 5 años contarán con 15 días de licencia de maternidad (actualmente queda a discreción del patrono).
Esta ley apoya los beneficios de la adopción, al igual que la ley de Reforma Integral de Procedimientos de Adopción, que minimiza de 120 a 75 días el proceso de adopción, desde su radicación en el Tribunal. La misma busca agilizar, flexibilizar y modernizar todo el proceso que conlleva la adopción, con el fin de que más familias puedan adoptar a menores puertorriqueños y no tengan que buscar otras alternativas en el extranjero. De hecho, hoy existen 110 niños entre las edades de 7 a 14 años, en espera de ser adoptados.
Por su parte, la primera dama, Lucé Vela, sostuvo que "es nuestro compromiso y objetivo incentivar y promover el que más personas decidan adoptar a menores custodios por el Departamento de la Familia, como un acto de amor incondicional. Cada uno de estos menores tiene el derecho de ser recibido por sus padres adoptivos en su nuevo hogar, con el mayor grado de estabilidad posible, creando así una base sólida para una buena relación afectiva y familiar. Esto, sin lugar a dudas, contribuirá en el desarrollo de la vida futura de dichos menores".
"Es sumamente importante que los padres, al igual que los niños, tengan la oportunidad de pasar por el proceso de establecer los lazos afectivos en el núcleo familiar y estrechar la relación del niño y sus nuevos padres", finalizó Fortuño.
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