Un día como otro cualquiera

Escrito por Ainí Martin Valero


Regla, La Habana


5 de agosto de 2011


(PD) El 26 de julio fue para los cubanos un día como otro cualquiera. Sólo que la mayoría de los que trabajan, descansaron. En la isla, los días 25, 26 y 27 de julio fueron declarados

feriados por el gobierno, para conmemorar los asaltos a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes por revolucionarios dirigidos por Fidel Castro.

El Día de la Rebeldía Nacional, como lo ha nombrado el gobierno, no fue un día de júbilo. No hubo fiestas en las calles, no hubo nada que celebrar.

En un recorrido realizado por Regla, lugar donde resido, todo estaba tan tranquilo y callado como en un cementerio.

Rosario Flores, una vendedora, comentó: “La gente no tiene qué celebrar, a los jóvenes le importa bien poco este día, a ellos solo les interesa el futuro, que muchos consideran incierto e inseguro”.

Niños que montaban carriolas, jóvenes que jugaban pelota, fútbol o dominó, otros tomaban bebidas alcohólicas…Esa fue la diversión de la mayoría de los jóvenes en estos días feriados.

La fecha del 26 de julio fue muy divulgada la Televisión Cubana en estos días. Pero no hubo fiestas, ni jolgorios. La fecha quedó olvidada por muchos que ahora solo piensan en cómo huir de la isla o “resolver” cuatro pesos para alimentar a sus familias.

ainimv@yahoo.com