Por: Eduardo E. Rodríguez Candelario
Este pequeño poema se la dedico a Laura Pollán y Héctor Maceda.
Veladas a granel, moradas visitadas,
sólo una es alumbrada, sobre la lápida aquél.
alma herida, lleno de sensibilidad en vasto cúmulo,
altruismo y abnegación ha sido tu caminar por la patria.
Abrid los portones, centinelas acontonarse,
trompetas prestos, laureles dispuestos,
ha llegado nuestra hermana con gladiolos predispuesto,
regocijad, festejad, ha ingresado un queribín más a nuestras filas de hermandad.
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