Miércoles, 31 de Octubre de 2012 04:36
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En el lugar, que llaman la candonga, se ubican varias mesas de vendedores por cuenta propia, y también de algunos que no poseen licencias. Todo lo que se vende allí es de primera mano, por lo que acude mucha gente de todas partes. Personas que vigilan a los agentes del orden público gritan agua cuando estos llegan, y así los vendedores pueden escapar y salvar su mercancía.
Eso fue lo que hizo el asesino, apodado Tata: gritar ¡agua!, y en medio de la confusión, disparar más de cuatro tiros a quemarropa contra un vendedor de unos 19 años. Algunos niños presenciaron el crimen.
Se supo que la víctima, que falleció horas después en el policlínico "Bernardo Pose", era hermano de otro joven que asesinó a un hijo de Tata.
Al hijo de Tata lo mataron hace aproximadamente un año en un bonche (fiesta callejera) durante una riña entre dos bandas de abakuás en San Miguel del Padrón. El asesino, nombrado Gerardo, de 22 años, se halla preso actualmente. El muerto tenía la misma edad del familiar. Los familiares de la víctima no efectuaron denuncia.
Hace varios días, un grupo de jóvenes con edades entre 20 y 25 años, armados con machetes, donde se encontraba un hermano de Gerardo, quien vende en la Candonga, hizo correr por todo el barrio de Monterrey a uno de los hermanos de la víctima. Su padre, el Tata, comentó: "Ya me llevaron un hijo ahora no me pueden llevar el otro".
Las personas que se encontraban en el lugar comentaron que la policía y Seguridad del Estado están detrás de los opositores, no importándole lo que sucede en el municipio, donde ha habido varios hechos de sangre protagonizados por jóvenes con edades entre 16 y 25 años.
Para Cuba noticias: dania.zuzy@gmail.com
