Economía
24 / 06 / 2013
- 09:01:33
OIT preocupada por amenazas a la libertad sindical en Venezuela
Un comité de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que recibe denuncias de atentados y amenazas a la libertad sindical instó a mantener la atención sobre los casos "graves y urgentes" de Guatemala, Irán y Venezuela, comunico la entidad internacional.
Al presentar sus informes sobre casos de países al Órgano de Gobierno de la OIT, el comité también llamó la atención sobre la situación en Venezuela, a cuyo gobierno pidió tomar todas las medidas que estén a su alcance para concluir las investigaciones y el procesamiento de los responsables del secuestro y maltrato de líderes de la Fedecámaras en 2010.
También señaló estar a la espera de la sentencia final sobre el ataque en 2008 contra la sede de esa asociación, que agrupa a los gremios empresariales venezolanos.
El comité consideró que la misión tripartita (compuesta por representantes de gobiernos, empleadores y trabajadores) aceptada por el Gobierno de Caracas contribuirá de manera decisiva a avanzar en la solución de los problemas relacionados con la libertad sindical en este país.
El comité en cuestión aborda los casos más urgentes y graves sobre la libertad de asociación, en particular los que suponen amenazas contra la vida y la libertad, así como la aparición de nuevas condiciones que pueden afectar la libertad de acción de un sindicatos o del movimiento sindical, en general, en un país.
Como aspectos a destacar, el comité mencionó el caso de Colombia, donde sus recomendaciones pasadas han tenido efectos positivos, al tiempo que felicitó la reintegración a sus puestos de líderes de sindicatos de Pakistán, Polonia y Perú.
Sobre Guatemala, esa instancia de vigilancia señaló que están pendientes de ser resueltos casos de asesinatos de sindicalistas, así como de amenazas, otros actos de violencia y deficiencias que llevaron a que estas situaciones -algunas de las cuales datan de 2005- hayan quedado impunes.
Consideró positivo un acuerdo de principio entre el grupo de trabajadores representado en la OIT y el Gobierno de Guatemala para que se investiguen rápidamente esos casos, se determinen responsabilidades y se apliquen sanciones a los autores tanto materiales como intelectuales.
En el mismo documento las autoridades guatemaltecas se comprometieron a brindar garantías para el desarrollo de las actividades sindicales, aunque el comité indicó abiertamente que espera "ver pronto que esa voluntad política se traduce en acciones y resultados concretos".
En relación a Irán, el órgano de la OIT sostuvo que mantiene sus esfuerzos para que se libere a un dirigente del Sindicato de Trabajadores de Teherán, Reza Shahabi.
Al presentar sus informes sobre casos de países al Órgano de Gobierno de la OIT, el comité también llamó la atención sobre la situación en Venezuela, a cuyo gobierno pidió tomar todas las medidas que estén a su alcance para concluir las investigaciones y el procesamiento de los responsables del secuestro y maltrato de líderes de la Fedecámaras en 2010.
También señaló estar a la espera de la sentencia final sobre el ataque en 2008 contra la sede de esa asociación, que agrupa a los gremios empresariales venezolanos.
El comité consideró que la misión tripartita (compuesta por representantes de gobiernos, empleadores y trabajadores) aceptada por el Gobierno de Caracas contribuirá de manera decisiva a avanzar en la solución de los problemas relacionados con la libertad sindical en este país.
El comité en cuestión aborda los casos más urgentes y graves sobre la libertad de asociación, en particular los que suponen amenazas contra la vida y la libertad, así como la aparición de nuevas condiciones que pueden afectar la libertad de acción de un sindicatos o del movimiento sindical, en general, en un país.
Como aspectos a destacar, el comité mencionó el caso de Colombia, donde sus recomendaciones pasadas han tenido efectos positivos, al tiempo que felicitó la reintegración a sus puestos de líderes de sindicatos de Pakistán, Polonia y Perú.
Sobre Guatemala, esa instancia de vigilancia señaló que están pendientes de ser resueltos casos de asesinatos de sindicalistas, así como de amenazas, otros actos de violencia y deficiencias que llevaron a que estas situaciones -algunas de las cuales datan de 2005- hayan quedado impunes.
Consideró positivo un acuerdo de principio entre el grupo de trabajadores representado en la OIT y el Gobierno de Guatemala para que se investiguen rápidamente esos casos, se determinen responsabilidades y se apliquen sanciones a los autores tanto materiales como intelectuales.
En el mismo documento las autoridades guatemaltecas se comprometieron a brindar garantías para el desarrollo de las actividades sindicales, aunque el comité indicó abiertamente que espera "ver pronto que esa voluntad política se traduce en acciones y resultados concretos".
En relación a Irán, el órgano de la OIT sostuvo que mantiene sus esfuerzos para que se libere a un dirigente del Sindicato de Trabajadores de Teherán, Reza Shahabi.
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