MARTES, 16 DE JULIO DE 2013 03:58
Cuba actualidad, Capdevila, Boyeros, La Habana, (PD) Todo parece indicar que dentro del destartalado edificio en que se refugian los gobernantes cubanos, conviven personajes que han asumido el despreciable papel de saboteadores cuyo propósito no es otro que dinamitar aquellas iniciativas dirigidas a reducir las tensiones que por más de 50 años mantienen enfrentados a los gobiernos de Cuba y los Estados Unidos.
Todo indica que las provocadoras acciones de estos individuos están orientadas y dirigidas por el sector más ultraconservador dentro del gobierno. Defensores contumaces de un continuismo inmovilista enfermizo, su único fin es que se mantenga inalterable la forma de gobierno que por más de 40 años mantuvo el hoy sustituido Fidel Castro.
Ahí puede que esté la explicación del artículo de Néstor García Itúrbide, titulado "El negocio es negar visas, no otorgar visas", publicado en el periódico Granma el 28 de junio.
García Itúrbide, de manera incisiva, la emprende contra la Oficina de Intereses de los Estados Unidos en La Habana, al denunciar el supuesto interés de la legación norteamericana de otorgar el menor número de visas a los cubanos residentes en la isla para visitar de manera temporal a sus familiares residentes en la nación del norte, principalmente los radicados en el Eestado de la Florida donde vive el mayor número de cubanos.
Llama la atención que García Itúrbide, sin recurrir a cifras que pudiesen haber testimoniado su aseveración, afirma que a la mayoría de los que son entrevistados por los funcionarios de la SINA les niegan el derecho de visitar de manera temporal a sus familiares.
Todo parece indicar que García Itúrbide mantiene excelentes relaciones con uno de los más conspicuo voceros de ese sector inmovilista, Iroel Sánchez, que tiene el muy oficialista blog "La pupila insomne" del cual el periódico Granma tomó el trabajo.
García itúrbide refleja de manera melodramática la decepción y disgusto de los que son rechazados. Irresponsablemente y en franco desconocimiento de los acuerdos migratorios firmados por La Habana y Washington en 1994, refleja el malestar y dice que los que no obtienen visas expresan que "no irían más a las entrevistas" y que optarían por un viaje ilegal por mar para llegar a las costas de la Florida.
García Itúrbide llega afirmar que el propósito del obstinado rechazo de los funcionarios de inmigración de la SINA a los que solicitan visas temporales, no es otro que alentar los viajes ilegales, hacer que aumenten, para propiciar desmesuradas campañas contra el gobierno cubano.
Con su proceder provocador, con sus falsos argumentos, lo que pretendió García Itúrbide fue dinamitar los recientes contactos entre representantes de las cancillerías de Cuba y los Estados Unidos.
Para echarle más gasolina al fuego, García Itúrbide afirma en relación con las entrevistas en que cada solicitante tiene que pagar 160 dólares no reembolsables si es rechazado, que la SINA en 10 semanas, recauda unos 4 800 000 dólares. No vacila en calificar de corruptos a funcionarios norteamericanos, que según afirma, han realizado operaciones de ventas de visas que han tenido lugar en gasolineras, supermercados y establecimientos gastronómicos privados, como el caso de la pizzería de la calle J entre 9 y 11, en El Vedado.
Ante tan graves acusaciones publicadas en el órgano oficial del Comité Central del Partido Comunista y el gobierno cubano, la SINA hizo pública una declaración con el fin de desmentir esta maléfica maniobra de descrédito urdida por aquellos que buscaban sabotear la reunión que el 17 de julio los representantes de los gobiernos de La Habana y Washington llevarán a cabo en la capital de los Estado Unidos y cuyo tema será las conversaciones migratorias. Dichas conversaciones fueron interrumpidas en el año 2011 por la detención y condena a 15 años de prisión del contratista norteamericano Alan Gross por dar a judíos cubanos sofisticados equipos de comunicación pagados por un programa de la USAID a favor de la democracia.
La declaración de la SINA destaca que de 150 entrevistas diarias para conceder visas temporales, en lo que va del presente año se han elevado a 500, y ha disminuido significativamente el tiempo de espera para esas entrevistas.
El pasado año 2012 se otorgaron 9369 visas. En los últimos seis meses, han visitados los Estados Unidos de manera temporal 16 767 cubanos residentes en las diferentes provincias de la isla.
En relación con el pago de 160 dólares no reembolsables por entrevista, no es un caso particular de Cuba, sino que es una norma que se aplica en todas misiones diplomáticas de los Estados Unidos en todo el mundo y cuyo cobro no está dirigido a obtener ganancia extra alguna.
En cuanto a los supuestos actos de corrupción en los que García Itúrbide involucra a personal diplomático de la SINA, el Departamento de Estado cataloga de muy grave tal aseveración, y solicita a todos aquellos que conozcan de estos hechos que por favor se pongan en contacto inmediatamente con la Oficina de Seguridad Regional a través del teléfono 839-4100.
Todo parece indicar que a estos saboteadores en esta ocasión les salió mal la jugada. La SINA y el Departamento de Estado los pusieron en la picota y quedaron como miserables mentirosos, cuyo propósito con el artículo publicado en el Granma no era otro que abortar la reunión del 17 de julio en Washington y de esa mantener el conflicto y la confrontación de la que solo se alimentan los sectores más inmovilistas dentro del gobierno cubano, algunos senadores y congresistas cubano-americanos y un reducido segmento del exilio histórico, radicado en lo fundamental en el sur de la Florida.
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