MARTES, 12 DE NOVIEMBRE DE 2013 00:09
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Cuba noticias, San Miguel del Padrón, La Habana, (PD) Bárbara Pagés Moré, madre de Ricardo Pagés Moré, de 41 años de edad, quien se encontraba recluido en la prisión para enfermos del VIH-SIDA, en San José de las Lajas, en la provincia Mayabeque, afirma que su hijo falleció por la deficiente atención médica que recibió.
Asegura que su hijo adquirió en la prisión Cinco y medio, en la provincia de Pinar del Río, un parásito llamado candidiasis, que le impedía comer, y otras patologías que no eran atendidas en la prisión antes mencionada.
En el año 2012, su madre solicitó varias veces al jefe de la prisión que lo llevaran a un hospital donde lo atendiera un especialista, y le otorgaran la libertad extrapenal, pero no le hicieron caso a sus pedidos.
Los medicamentos que tenían que suministrarle por sus enfermedades se tardaban meses para proporcionárselos, por lo que se agravó su enfermedad.
Fue trasladado para el hospital nacional de reclusos del Combinado del Este el 21 de noviembre de 2012.
Refiere Bárbara Pagés que el doctor Norberto, quien es querido por todos los enfermos de VIH-SIDA ingresados en el hospital por su preocupación por los presos, fue quien salvó a su hijo.
Ricardo Pagés regresó curado a la prisión.
En el mes de junio de 2013, cuando su madre pensó que su hijo saldría de pase, ya estaba de vuelta en el hospital de reclusos, en grave estado.
Cuando no sabían qué podían hacer con el enfermo, lo remitieron para el IPK, pero allí no lo aceptaron porque las salas estaban abarrotadas de pacientes con cólera. Fue ingresado entonces en el Hospital Clínico Quirúrgico La Dependiente.
En La Dependiente le dieron dos paros cardiacos.
El 10 de octubre le otorgaron la licencia extrapenal. Falleció ocho días después.
Su madre culpa al jefe de la prisión de enfermos de VIH-SIDA, y a las instituciones a las que solicitó la excarcelación por licencia extrapenal de su hijo.
Para Cuba noticias: dania.zuzy@gmail.com
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