lunes, 14 de abril de 2014

Patricio Montesinos y sus estrepitosas mentiras

Oscar Sánchez Madan
maria-corina-machadoCuba actualidad, Cidra, Matanzas, (PD) Un periodista del diario Granma, Órgano Oficial del Partido Comunista de Cuba, Patricio Montesinos, trató de embaucarnos cuando en un artículo del 2 de abril, en dicho periódico calificó de "violenta" y "mediocre" a la reconocida dirigente opositora venezolana María Corina Machado.
Esto no asombra a nadie. Los portavoces del régimen de Raúl Castro tienen el hábito de mentir. El embuste ha sido un arma muy utilizada por sus medios de propaganda para engañar al pueblo. Recordemos cómo en el año 2003, la dictadura condenó a 75 demócratas a penas de hasta 25 años de cárcel con el pretexto de que supuestamente eran agentes del gobierno de los Estados Unidos.
Montesinos, quien cumple órdenes de sus patrones del Departamento Ideológico del Partido Comunista, no podía hacer otra cosa que injuriar sin fundamento a la distinguida y valiente anti-chavista. María Corina Machado es blanco de sus cobardes ataques por su singular vocación democrática. Es ese un don con el que no cuentan los voceros del régimen castrista.
Esta ex -diputada a la Asamblea Nacional (fue recientemente expulsada de ese órgano legislativo de forma arbitraria), apoya las masivas protestas estudiantiles antigubernamentales que tienen lugar en Venezuela. El régimen autoritario chavista no se lo podía perdonar.
Se puede expulsar a una demócrata de un parlamento, pero no se le puede obligar a callar. Eso lo sabe bien el señor Montesinos.
En Cuba, opositores como Ángel Moya Acosta, Félix Navarro Rodríguez, Iván Hernández Carrillo y Guido Sigler Amaya, cumplieron más de siete años de injusta prisión, mas no los lograron silenciar.
Han sido más que certeras las denuncias formuladas por esta apreciada representante del hermano país andino, tendientes a revelar el desabastecimiento de productos básicos, la criminalidad y la injerencia castrista en su nación. Han sido muy oportunas porque la ambición e ineptitud de los gobernantes chavistas ponen en peligro la libertad de los venezolanos.
El hecho de que el ex-militar golpista Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, haya ordenado la defenestración de Corina Machado indica que en Venezuela no existe un estado de derecho. Esto lo revelan, además, los desproporcionados ataques con gases lacrimógenos que sufrieron, el pasado primero de abril, cientos de manifestantes que respaldaban a la popular demócrata.
Un dudoso pretexto empleó la dictadura castro-chavista para retirarle su bien ganada condición de diputada: la acusaron de aceptar el cargo de embajadora alterna de Panamá, en un reciente cónclave de la Organización de Estados Americanos. Sin embargo, el propio gobierno de ese país explicó que Corina Machado no representaría los intereses panameños, sino que denunciaría la crítica situación que vive su patria.
No es mediocre quien exige a los gobernantes que mejoren las condiciones de vida de sus conciudadanos. No es violento aquel que, cívicamente, defiende la paz y los derechos de sus compatriotas.
Corina Machado no puede ver con buenos ojos que hasta la mismísima representante de la Defensoría del Pueblo, Gabriela Ramírez, dude en evaluar actos de tortura y calle ante los crímenes de los militares y los parapoliciales "colectivos". No consigue permanecer callada cuando en las calles venezolanas se agrede a la población civil y los atacantes gozan de la más absoluta impunidad.
Mentirosos patológicos, como el señor Patricio Montesinos, han existido en todas partes, en diferentes épocas. Se creen sus propios cuentos y pretenden que otros los acepten. Son más notables –en la esfera de la política- en los regímenes totalitarios de izquierda, donde los gobernantes y sus patéticos voceros, para imponer sus oscuras ideas a millones de personas, emplean el engaño.
Ahora mismo, el régimen militarista de Nicolás Maduro mantiene en la cárcel al joven líder opositor Leopoldo López. Para cometer esta arbitrariedad, el ilegítimo mandatario lo ha acusado injustamente de estimular la violencia. Se sabe que eso no es cierto: este eminente político es un patriota convencido.
Gracias a Dios, vivimos en la era de Internet. A los embusteros ya no les es posible mentir sin que los descubran. A pesar de la férrea censura de estos días, cientos de venezolanos han difundido lo que acontece en su nación, a través de las redes sociales. Allí, según sus denuncias, un gobierno que avanza hacia el totalitarismo, viola los derechos básicos de millones de personas.
Esa es la causa por la que el régimen de Nicolás Maduro se ha ganado una enérgica repulsa mundial. Políticos, cantantes, escritores, artistas, organizaciones no gubernamentales, deportistas no han dudado en condenar las reprochables acciones de los chavistas que pudieran muy bien calificarse de genocidio.
Ante esta situación, al periodista de Granma Patricio Montesinos, no le queda otra opción que reconocer que la que "se mató como chacumbele" -como reza el estribillo de una famosa guaracha cubana de los años 40, del pasado siglo- fue la dictadura venezolana. Los ataques a la prensa, los más de 2000 arrestados, los casi 40 muertos; y los centenares de heridos o torturados, así lo evidencian.
Para Cuba actualidad: sanchesmadan61@yahoo.com
Foto: Osmar Laffita

No hay comentarios:

Publicar un comentario