Parche estatal para el cine 3D, casi un año después de prohibir las salas privadas
Actualmente solo hay cuatro espacios estatales en todo el país. El ICAIC avisa que no se programarán 'productos banales ni tonterías'.
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Diez meses después del cierre de los cines privados en 3D, el Gobierno solo ha conseguido poner en funcionamiento cuatro salas en todo el país: dos en La Habana, una en Santiago de Cuba y otra en Camagüey.
El diario oficial Juventud Rebelde informa este domingo que los espectadores capitalinos podrán disfrutar "producciones de reciente factura" en la "acogedora" sala Charlot, del cine Chaplin, dos veces al día, y en la sala Patria, tres. Entre las dos instalaciones suman 75 asientos.
"No podían continuarse admitiendo, frente a los ojos de todos, las violaciones que se estaban cometiendo", dijo en noviembre pasado el periódico Granma para justificar el cierre de los cines privados en 3D.
Las pequeñas salas, casi todas con tecnología de tercera dimensión inexistente en las grandes salas estatales, funcionaban con licencias de operador de equipos para recreación infantil.
Granma sostuvo entonces que "por encima de la afectación temporal que las medidas adoptadas puedan causar a un sector de la población, está el interés superior de toda la ciudadanía en preservar la legalidad y el orden".
Este domingo, casi un año después, el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC) plantea que su política es "abrir nuevos espacios en toda la Isla", pero en la medida en que logre el "financiamiento necesario para adquirir el costoso equipamiento técnico".
Benigno Iglesias, vicepresidente del ICAIC, reiteró que la línea será "exhibir lo mejor, sin acudir a productos banales ni tonterías donde se promueva la violencia gratuita o la discriminación social".
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