jueves, 30 de octubre de 2014

Denuncian matanza de 600 iraquíes por milicianos

Denuncian matanza de 600 iraquíes por milicianos

DESTACADAS

BAGDAD (AP) — Milicianos del Estado Islámico perpetraron una matanza de presos chiís cuando tomaron Mosul, la segunda ciudad de Irak, en junio, dijo el jueves la organización de derechos humanos Human Rights Watch.
HRW dijo que unos 600 presos chiís de la prisión de Badoosh, en las afueras de Mosul, fueron obligados a arrodillarse junto al borde de una hondonada y masacrados con armas automáticas.
La organización con sede en Nueva York dijo que los chiís fueron separados de varios cientos de sunís y algunos cristianos que fueron liberados luego. Algunos presos curdos y yazidíes también fueron asesinados, y entre 50 y 100 hombres que decían ser sunís fueron llevados a un lugar desconocido.
La declaración se basó en entrevistas con 15 sobrevivientes chiís.
Los presos estaban cumpliendo condenas por diversos delitos, desde asesinato hasta infracciones no violentas.
Antes de separarlos, los milicianos obligaron a 1.500 presos a subir a camiones y los llevaron al desierto a unos dos kilómetros de la prisión, dijeron los sobrevivientes. Después de llevarse a varios cientos en los camiones, obligaron a los chiís a formar una larga hilera junto a una hondonada y numerarse para luego rociarlos con fuego de ametralladoras.
"Una bala me dio en la cabeza y caí, y entonces sentí otro balazo en el brazo", dijo un sobreviviente. "Una persona recibió un balazo en la frente que salió por el otro lado y cayó sobre mí", dijo el sobreviviente, de acuerdo con el documento.
Antes de que comenzaran los disparos, dijo, besó a los hombres que lo flanqueaban "porque sabíamos que íbamos a morir" y "después de despedirnos saqué la foto de mi hija y la besé y rogué a Dios que me salvara para ella porque no tengo a nadie más".
Unos 30 a 40 hombres sobrevivieron, al rodar y fingir su muerte o al estar protegidos por los cadáveres de otros. Algunos heridos murieron al tratar de alejarse del lugar.
Los milicianos encendieron una fogata y las llamas se extendieron a los cadáveres. HRW ocultó los nombres de los sobrevivientes para protegerlos de posibles represalias.

No hay comentarios:

Publicar un comentario