Resulta sospechoso

ntegración es la palabra de Orden.

Por Faisel Iglesias.

Resulta sospechoso que cuando se habla por estos medios de las futuras relaciones de Cuba con EU, y se expresan y se muestran documentos históricos, de la autoria de los padres fundadores de nuestra Nación-Estado, inmediatamente surgen voces declarándose más que adversarios, enemigos, y la histeria y el fanatismo llega a tal extremo que ni leen ni escuchan y declaran de inmediato el combate a la otra idea.

Ya la historia sabe el carácter y las magnitudes de declarar a las ideas como enemigas y las consecuencias que ha traído para la humanidad castrar el pensamiento, matar las ideas, en fin violar los derechos humanos.

Pero más que todo ello refleja ignorancia, deseos de echar a pelear, a dividir -¿a quien le conviene?-, lo que me hace dudar de sus intenciones. Peor aún cuando se habla, se mencionan palabras que nadie ha traído como propuesta, sino como meras referencias históricas.

Hablar de anexionismo, como propuesta política, como proyecto de país, además de criminal resulta un anacronismo histórico. Utilizar un discurso propio de centurias pasadas.

A nadie se le puede ocurrir negar que Cuba, como nación históricamente determinada tiene su propia misión hemisférica y en el mundo.

Renunciar a nuestra cultura, idioma, a nuestra misión como nación,  para ir a formar parte de otra nación podría calificarse de crimen histórico.

Nuestro tiempo es otro. Es el tiempo de la Revolución Informática, la Era Digital, de un mundo sin fronteras y sin distancias, donde los valores son otros y por tanto son otros los instrumentos de sociabilidad.

Hoy, como nunca antes, el hombre no es negro ni blanco, ni de aquí ni de allá, dígase hombre y se ha dicho todo.

Por tanto, en nuestro tiempo, la integración de los hombres, los pueblos y las naciones es lo que podrá contribuir al equilibrio aún vacilante de Las Américas y el mundo.