Por Andrea Nomecallo
Caracas, Venezuela, 9 de octubre de 2010, (PD) Estoy muy cansada, pero quise escribir sobre la gran victoria que obtuvimos ayer domingo 26 de septiembre.
Aquí estoy, con mi meñique orgullosamente teñido y con las mayores alas por mi trabajo cumplido. Dieciocho horas ininterrumpidas de tensión y responsabilidad. Las horas en el colegio electoral, más cuatro horas de espera por los resultados. Me levanté a las 4.00 am del domingo y me acosté a las 3.00 am de lunes.
Ayer demostramos que sí se puede cuando se dejan a un lado los intereses personalistas, cuando nos unimos por el bien común. Ni Chávez ni nadie, nos sacará del juego democrático. La violencia no tiene cabida en el cambio en Venezuela, ayer lo demostramos.
Hoy somos mayoría, a pesar de la trampa montada con los circuitos. Obtuvimos más votos y eso nos insufla más ánimo hacia el 2012.
Chávez convirtió las parlamentarias de ayer en un plebiscito… y lo perdió.
Estoy feliz, orgullosa de todos nosotros los venezolanos que no le bajamos la cabeza al disfraz de tirano llamado Chávez. Estoy feliz de que fuéramos unidos a estas elecciones... eso hizo la diferencia, eso nos dio el triunfo de 65 curules... Tenemos mayoría calificada.
¿Cual es mi sentimiento hoy? Se nos vino un camión encima y logramos pararlo con nuestras manos. No olvidaré la imagen de muchos venezolanos con nuestros meñiques teñidos, con una canción de fondo que me encanta y a cuya letra agregué: Quiero vivir mil veces y las mil veces contigo, Venezuela…
andreanomecallo@yahoo.es
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