Escrito por Odelín Alfonso Torna
Arroyo Naranjo, La Habana
20 de junio de 2011
(PD) Para los cubanos, el fútbol de casa es lo más parecido a unos carnavales sin carrozas ni muñecones, a tiempo y dinero perdido, a ese empeño de muchos que se enreda en el no hay o no se puede de unos pocos.
Otra vez –y será así por largo tiempo- la selección nacional cubana de fútbol quedó mal parada en la Copa de Oro 2011, correspondiente al circuito CONCACAF, esta vez con sede en Texas, Estados Unidos de América.
Con los desmanes del fútbol cubano, me refiero a la sistematicidad y actualización técnico-táctica, la escasa participación en eventos del área centroamericana o a la atención debida por parte de las autoridades deportivas. Así, es imposible ver desarrollar este deporte en toda su dimensión.
Pesa además, la inclinación de los medios de comunicación oficial y la afición en general, por el fútbol foráneo y sus goleadores. Digo esto porque la televisión cubana transmite las Copas de Clubes Campeones de Europa, América y los mundiales cada cuatro años, en fin, fútbol del bueno para incentivar su práctica hacia adentro, pero prefiere ahorrarse el alquiler de la señal satelital cuando se trata del equipo nacional de fútbol. Más aún si los pronósticos apuntan a que los cubanos reciban una goleada fuera de casa.
El once de Cuba quedó prácticamente eliminado en la primera ronda de la Copa de Oro 2011. La portería antillana fue penetrada por 10 disparos en 180 minutos de dos juegos, primero ante Costa Rica y luego ante México. La selección de México, a pesar de presentarse sin cinco de sus mejores jugadores (expulsados por dopaje), paseó la distancia después de conectar su primer gol en el minuto 35, por mediación de Javier "el Chicharito" Hernández.
La prensa oficial, con acentuada cobertura informativa sobre los voleibolistas cubanos en su ronda mundial y la preparación del equipo Cuba de béisbol que jugará en el torneo holandés de Haarlem, poco dijo de la goleada propinada por Costa Rica y México a Cuba. En tanto, la prensa plana no anduvo con rodeos. El diario Juventud Rebelde calificó el partido contra México de "otra masacre", mientras el Órgano Oficial del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, Granma, colocó la derrota antillana en las breves de la sección Telescopio.
Se vio, o mejor dicho vieron los reporteros oficiales, a un equipo físicamente agobiado, con deficiente defensa en su campo y aisladas posesiones de la esférica.
Escamotear la transmisión en vivo del once cubano, en presentaciones de la CONCACAF que terminaron en las goleadas de Dallas y Charlotte, lejos de esconder el bochorno, retiene el interés de nuestra afición por el fútbol local, un deporte sin tradición, pero orientado a masificarse.
odelinalfonso@yahoo.com
Foto: Ana Torricella
Primeros pasos de la futura estrella.
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