Desmentidos por los comunistas

Escrito por Oscar Sánchez Madan


Cidra, Matanzas


23 de julio de 2011


(PD) Se equivocan algunos colegas de la prensa extranjera quienes aseguran que la política de “reordenamiento” económico impulsada por los castristas en la actualidad, transcurre con éxito. No sé en qué basan esta dudosa idea apartada totalmente de la realidad. Los mismos comunistas cubanos se han encargado de contradecirlos.

Parece que a estos comunicadores del mundo libre les sucede lo mismo que al escritor colombiano Gabriel García Márquez, y al Cardenal Jaime Ortega: Entran a un baño sucio y no ven la mierda. O, mejor dicho, no la quieren ver.

Y es que durante las últimas semanas se han celebrado en Cuba asambleas de comunistas que demuestran cuán equivocados están esos periodistas foráneos que coquetean con la extrema izquierda internacional y desempeñan muy mal el papel de cubanólogos.

Por ejemplo, el reciente Pleno del Partido Comunista en Morón, Ciego de Ávila, no halló nada para elogiar en las esferas económica y social ya que en esta localidad perduran la corrupción, las ilegalidades y la ineficiencia empresarial. Así lo manifestaron los asistentes en los debates.

En el municipio de Pinar del Río los marxistas se reunieron bajo el imperativo de no tolerar más que continúen el desorden y la indisciplina en la economía. Un informe presentado en dicho evento reconoce, en el período que se evalúa, el incumplimiento de la producción mercantil en un 2,0 %, el sobregiro en el consumo eléctrico en un 2,3 %, problemas en el control interno, entre otras dificultades.

A aplicar sanciones a quienes mienten o no informan la verdad instaron los participantes en el Pleno del Partido Comunista en el municipio de Las Tunas. En dicha reunión se analizaron problemas subjetivos que afectan la producción de leche, viandas y otras producciones.

También se debatieron las afectaciones al comercio, la gastronomía y los servicios de salud.
Asimismo la reunión ampliada del Consejo de Ministros, efectuada hace algunos días, sirvió de escenario para que el General en Jefe, Raúl Castro, exhortara a sus partidarios a acabar con la desorganización y el descontrol prevalecientes en muchos lugares. “Los acuerdos del Congreso no van a quedar engavetados”, amenazó el ´Generalísimo´ al avizorar la posibilidad de que se incumplan las decisiones del VI Congreso del Partido relacionadas con la economía.

Por si fuera poco el diario Granma, órgano del Partido Comunista, informó el pasado 30 de junio, que en Pinar del Río, al concluir el primer semestre del presente año, “el acopio de leche en la provincia presenta una deuda de más de dos millones de litros con respecto al plan, diferencia muy difícil de recuperar”.

Tanto en la más occidental de las provincias cubanas, como en otras, son diversos los problemas que enfrenta la producción agropecuaria. En el municipio granmense de Jiguaní, por ejemplo, es elevado el índice de hurto y sacrificio de ganado mayor y se reiteran otros delitos. Eso se confirmó en el Pleno local del Partido Comunista.

Yuri Rodríguez Hernández, miembro del Buró Provincial del Partido en Villa Clara, señaló en el Pleno efectuado en Sagua La Grande, que en ese territorio han decrecido la agricultura urbana y las producciones de leche, carne vacuna y porcina debido a los bajos rendimientos y el no aprovechamiento de la jornada laboral.

Algo singular se informó en el evento partidista capitalino. En dicha asamblea se reconoció que La Habana concluyó el mes de abril con una deuda millonaria con el presupuesto estatal a causa de la demora en pagar de empresas como Texcal, Comercio y Gastronomía, entre otras.

Esos y otros problemas de la economía cubana que afectan la alimentación, la construcción de viviendas, la reparación de las vías de comunicación, la educación, la salud, el desarrollo industrial y muchos otros renglones productivos o de servicios, los ha difundido la prensa oficial. Aún así hay quienes, no sé por qué razones, lo ven todo color de rosa.

Ha sido tan evidente el reconocimiento de los múltiples problemas que afectan a la economía que José Ramón Machado Ventura, Segundo Secretario del Comité Central del Partido Comunista, en la asamblea celebrada en la provincia de Mayabeque, llamó a la militancia a “erradicar las acostumbradas y nada provechosas autocríticas”.

Varios colegas extranjeros hablan sobre el incremento de los “cuentapropistas” o actores del sector privado, pero dicen pocas palabras sobre los cientos, tal vez miles de licencias o permisos devueltos por muchos de estos, quienes deseaban emprender un negocio sin el tutelaje estatal y no soportaron los altísimos impuestos, las escandalosas trabas burocráticas, la notable falta de insumos y los excesivos controles oficiales.

Resulta incoherente aplicar rígidos controles a los cuentapropistas mientras, como informó al semanario Girón, de Matanzas, Carmen Ortega, directora del Banco de Créditos y Comercio, aumentan los impagos del sector empresarial estatal. Esta funcionaria calificó de significativos y alarmantes los reportes de cuentas por pagar o cobrar vencidas no conciliadas y dijo: “… es quizás el indicador más delicado, porque pudiera encerrar operaciones fraudulentas”.

Quienes afirman que la denominada actualización del modelo económico castrista avanza sueñan. Tal vez han visto muchos filmes del cineasta norteamericano Steven Spielberg o leído demasiado el relato “Alicia en el país de las maravillas”, del escritor inglés del siglo XIX, Lewis Carrol.

Si la economía nacional progresa cómo es posible que a los 100 asociados a la camagüeyana Unidad Básica de Producción Cooperativa “Jacksonville”, ubicada en Santa Cruz del Sur, no se les haya pagado salario alguno durante el primer semestre del presente año. ¿Es esto concebible en un país que, supuestamente, se reorganiza y prospera? Por supuesto que no.

Para que los problemas económicos y sociales de Cuba se resuelvan tiene que haber un verdadero cambio de mentalidad y una sana voluntad política oficial que impulse la liberalización de la sociedad en general. Sin libertades, incluidas las económicas, se hace más difícil el desarrollo.

Lo que necesita Cuba es una economía diversificada, como lo señaló el Apóstol de su independencia José Martí. Para lograrla es imprescindible realizar cambios profundos que posibiliten la eliminación de las actuales relaciones totalitarias de producción.

Con un régimen absolutista que, bajo presión ciudadana, promueve cambios cosméticos en la economía para engañar a la opinión pública y evitar las verdaderas y transformaciones, no se logrará la prosperidad que los cubanos ansían. Un sistema de planificación comunista diseñado por una privilegiada oligarquía que no respeta los derechos de sus conciudadanos constituye un obstáculo en la imprescindible carrera por el desarrollo económico de la isla.

La realidad cubana notoriamente nos indica que lo emprendido por la dictadura en la economía no pasa de ser una cantinflesca caricatura de reformas. La misma mantendrá al país en su actual estancamiento, a pesar de las aseveraciones de un reducido grupo de comunicadores foráneos.

Todas las evidencias expuestas valen mucho más que la opinión de algunos ¿equivocados? periodistas. Máxime cuando con cifras y argumentos son los propios comunistas cubanos quienes inexorablemente los desmienten.

sanchesmadan61@yahoo.com

Foto: Oscar Sánchez Madan