Filadelfia, Cuba actualidad, (PD) Mira que el capitalismo es malo!!!, esa frase la escuche muchas veces en boca de los poco que todavía creen en la revolución cubana y ¿si supieran cuan equivocados están?.
Cuando veo el maravilloso funcionamiento del transporte urbano en Philadelphia, recuerdo con tristeza lo que pasan día a día los trabajadores en la isla para llegar a sus centros de laborales.
En Cuba tomar un ómnibus es toda una odisea, ese tema ha sido muy tratado en muchos artículos y reportajes.
Desde hace unos pocos años el gobierno cubano acepto ofrecer más licencias a personas que desean tomar sus carros particulares para trasladar personas, de un municipio a otro en la capital. Ya sea en camiones, autos viejos o en carros más modernos. Con todo y eso la situación de la trasportación en la capital sigue siendo pésima y los cubanos pueden pasar horas en una parada esperando la guagua que llega y no para, o la que para y no cabe una persona más.
Sin embargo en los meses que llevo residiendo en esta ciudad me he quedado con la boca abierta cuando tengo que tomas un bus, como se le dicen por acá. A cualquier hora y en cualquier momento, el ómnibus viene medio vacío, eso es un asombro para nosotros los cubanos. Muchas rutas pasan cada 7 o 10 minutos, otro motivo para quedarnos boqui abiertos.
Por otro lado los bus cuentan con calefacción en el invierno y aire acondicionado en el verano. Dentro del bus un cartel que cambia constantemente te anuncia la próxima parada, te da fecha y hora del día y te dice cuál es el lugar de destino final. Toda una maravilla para aquellos que venimos de un lugar donde un ómnibus es lo más insoportable de tomar.
Sobre el costo del transporte considero que es un poco caro, pero tiene una ventaja. Todos los fines de semanas en distintos lugares de la ciudad se pueden comprar una tarjeta para el trasporte.
Este transpass (pase de trasporte), tiene un coto de $24 dólares. La ventaja es que te sirve para montar el bus y el metro de lunes a domingo, las veces que sean necesarias. Es decir pagas esa cantidad y puedes moverte por toda la ciudad sin límites.
Los bus que rodean mi vecindario son diversos, hay muchas rutas. Unas se conectan con otras y no tienes necesidad de caminar a penas. No son muchas personas que toman el transporte urbano en esta ciudad, pero si es muy necesario para aquellos estudiantes o trabajadores que todavía no tiene un carro para transportarse.
En fin cuando veo estas cosas pienso en mi vecino Alcides en Regla, que debe llegar a las 8:00am a su trabajo de custodio y sale a las 6:00am porque de otra manera, no llegaría a tiempo. Su viaje de 30 minutos en la guagua se convierte en dos horas por lo terrible de la situación.
Espero que algún día todo esto cambie y en la isla puedan gozar de estas facilidades que un sistema capitalista como este, ofrece a todos sus pobladores.
Para Cuba actualidad martinvaleroaini@gmail.com

