Por Pilar Molina A.
Por Pilar Molina A.
Con la declaración oficial del Partido Comunista el jueves quedó claro: Max Marambio es una persona non grata en Cuba. Podrá Fidel Castro haber sido como su segundo padre; podrá haber luchado por la revolución, y también por su exportación armada a África; podrá haber integrado las fuerzas de élite, las Tropas Especiales, pero ahora el gobierno de Raúl Castro investiga a su empresa de alimentos Río Zaza, según dice el régimen, por "irregularidades y violaciones de las leyes vigentes", y parece sumar al chileno ex GAP y ex MIR, sin nombrarlo, dentro del grupo de directivos chilenos supuestamente implicados que "abandonaron el país o no se presentaron al inicio del proceso".
La declaración fue publicada por el diario oficial Granma a propósito de la muerte del ingeniero químico chileno Roberto Baudrand, que trabajaba en la empresa investigada de Marambio y que tenía orden de arraigo, lo cual también reconoce el PC isleño en su declaración. Fue su muerte en estas circunstancias y después de 3 interrogatorios por parte de la fiscalía lo que alertó sobre la posible causa de su muerte. Granma lo atribuyó, basándose en la autopsia, a una "insuficiencia respiratoria aguda", que vinculó a fármacos en su estómago y a la ingesta de alcohol. Al lado del cuerpo del ingeniero químico había medicamentos, pero la familia ha alegado que se trata de medicamentos por su enfermedad cardíaca, los cuales no tienen el efecto, como las benzodiazepinas, de potenciarse con el alcohol y paralizar el centro respiratorio.
El comunicado puso fin a una serie de versiones encontradas y sin fuentes. Por un lado, que Marambio sería víctima de una operación de matonaje político que originó la auditoría a su empresa, acompañada de interrogatorios y detención de sus empleados, lo cual respondería a su apoyo a Marco Enríquez-Ominami. Lo responsabilizarían de posibilitar el triunfo de Sebastián Piñera, que ha reclamado categórico la falta de democracia en Cuba. Y por el otro, que irregularidades en su empresa fueron las que originaron la fiscalización y cierre de Río Zaza, y que no hay tal purga PC por la asunción de Raúl Castro al poder.
Los hechos
Alimentos Río Zaza se creó hace más de 10 años en Cuba con dos plantas que producen jugo de fruta y lácteos. La definen como empresa mixta, porque es en un 50% propiedad de Coralsa, una especie de Corfo estatal, pero enfocada a los alimentos. La otra mitad es de Ingelco, la sociedad de Marambio, donde su hermano Marcel también tiene una participación menor.
El comunicado del PC no mencionó ninguna investigación contra la empresa Sol y Son -como había trascendido antes-, que Marambio transfirió a su hermano Marcel unos 5 años atrás. Es una empresa que vende turismo principalmente a Cuba, pero tiene filiales también en México, Argentina y España. También es del área mixta. Cubana de Aviación tiene un 70% en la de Cuba y la mitad en las internacionales. A su vez, el porcentaje restante lo tiene ING, propiedad de Marcel, quien es unos 10 años menor que su hermano. Como él, fue militante de izquierda, estudió economía en La Habana, y vive la mayor parte del tiempo en España.
Mientras Sol y Son ha seguido siempre funcionando, las dos plantas de Río Zaza se cerraron en febrero, con poco menos de un mes de diferencia. Perdieron sus trabajos más de 400 operarios. La oficina central de la fábrica, sin embargo, siguió funcionando en La Habana, con la planta administrativa, unas 10 personas. Entre ellas, su gerente general, Roberto Baudrand Valdés, quien llegó al cargo dos años atrás.
El ex alumno del Saint George había trabajado antes en dos empresas de lácteos en Chile: Nestlé y Parmalat.
Cierre e investigación simultáneos
No está claro si el cierre de las plantas, simultáneo a la fiscalización policial, tiene una motivación política que va más allá del "corralito" que ha afectado a todos los inversionistas extranjeros por la falta de divisas que padece la economía comunista.
Todas las empresas extranjeras tuvieron problemas en 2009 para transferir utilidades, en mayor o menor grado, y algunas lograron descongelar parte de sus fondos pagando comisiones. Esta opción no está abierta para las empresas mixtas.
A Río Zaza el Estado cubano dejó de hacerle transferencias hace unos 9 meses, señalan fuentes vinculadas a los hechos. Eso selló su suerte, porque como todo lo que vende está envasado, acumuló una deuda con la firma Tetra Pak por 7,5 millones de dólares, lo cual llevó a la transnacional a suspender el suministro de envases.
El Estado isleño, porque no tiene divisas o no quiere, está proponiendo a Tetra Pak reanudarle los pagos a partir de enero de 2011. Pero la transnacional exige una serie de garantías en cuanto a reconocimiento de deuda y compromiso de pago, misión en la cual está el abogado PC Eduardo Contreras. Fue contratado por Marambio para avenir a las partes de manera de echar a andar de nuevo la industria.
A pesar de los numerosos contactos isleños de Contreras y su cercanía afectiva con la isla -donde vivió el exilio y ejerció como abogado-, el relanzamiento de la empresa se ve cada vez más complicado.
La mala noticia, en ese escenario, es que el aval de esa deuda de 7,5 millones de dólares es Max Marambio y que el Estado le adeuda a su empresa Ingelco otros 23 millones de dólares.
La Junta que ratifica a Marambio
Quienes como Marco Enríquez-Ominami alegan una persecución política del ahora millonario empresario, fijan el inicio de la fiscalización a su industria un día después de las elecciones presidenciales del 13 de diciembre. La asumió la Contraloría, creada por Raúl Castro hace poco más de un año, pero fue ordenada por la Fiscalía General de la República, un ente histórico.
Como sea, cuando Roberto Baudrand volvió a su patria a pasar la Navidad, la auditoría ya estaba en marcha, y lo más probable es que no habría regresado a La Habana si hubiera sospechado una persecución en su contra. Menos, cuando se ha informado que a fines de diciembre fueron detenidos otros 3 empleados, que hasta el día de hoy permanecen recluidos, aunque han tenido contacto con sus familiares.
Marambio, en cambio, después de su último viaje a la isla, el 8 de diciembre, nunca más volvió. Es posible que temiera una acción en su contra. Una de las detenidas es su contadora por 30 años Lucy Leal. Otro es un gerente técnico que han identificado como Álvaro Ruiz, y el tercero sería un chofer o similar, no individualizado. Todos cubanos y ninguno hasta ahora formalizado.
Lo curioso es que relatan que en la junta de accionistas de Río Zaza, celebrada el miércoles 24 de marzo, donde había 3 representantes de la parte cubana y 3 de Ingelco, por unanimidad fue ratificado Marambio como vicepresidente de la empresa. Era su presidente, pero en las firmas mixtas, de acuerdo a la ley de inversiones extranjeras, la cabeza es rotativa, y le tocaba presidir a la parte cubana.
También fue confirmado en la gerencia general Baudrand, lo cual es aún más raro, considerando que el fin de semana anterior había sufrido 3 intensos interrogatorios. En la misma junta fue ratificada como directora comercial Ofelia Liptak, la esposa de un famoso general de la revolución que algunos medios también han dado por detenida. Ella estaba presente en la junta, sin embargo, según aseguran quienes conocen el tema de cerca.
'' Es posible que Marambio haya introducido prácticas de la economía de mercado en su empresa en Cuba, las que ahora el régimen consideraría ilegales.
Muy católico y alegre
Roberto Baudrand (59) vivía solo en Cuba en un pequeño y moderno departamento con vista al mar. Su mujer, Elena Cavagnola, se movía entre Chile y La Habana. Ambos tenían una hija en común, Alejandra, y dos hijos cada uno de su respectivo primer matrimonio.
Él es descrito como una persona alegre y muy católico. Se acercó a los Legionarios de Cristo y al sacerdote John O'Reilly, quien lo acompañó después del infarto que sufrió hace cerca de 10 años, razón por la cual se medicó hasta su muerte. Era de los que tenía santos en los libros y su fe no pasaba inadvertida. Quienes lo conocieron aseguran que su pensamiento político era muy lejano a las ideas de izquierda.
También es descrito como increíblemente trabajólico. Incluso de sábados y domingos.
Sus familiares y amigos refieren su buen carácter y su honestidad a toda prueba. "Un hombre excepcional", señaló en un comunicado Max Marambio tras la muerte del ingeniero, a quien contrató en vista de la brillante carrera que había desarrollado en la idustria alimenticia.
La familia, desde que supo de su fallecimiento, ha descartado que hubiera podido atentar contra su vida.
¿Purga, irregularidades, delitos?
Fue el fin de semana del viernes 16 de abril cuando habrían comenzado los interrogatorios a Roberto Baudrand. Relatan que fueron 3 en días sucesivos, y el primero se habría prolongado por más de 10 horas. Al abogado Eduardo Contreras le contó que había sido muy duro y él lo vio muy nervioso y tenso. Contreras lo atribuyó a que lo interrogaban de hechos anteriores a su gerencia, le hacían ver irregularidades como diferencias de precios y él no tenía los documentos para respaldar nada, porque la fiscalía incautó todos los papeles al iniciar la investigación.
El comunicado del PC cubano tampoco habla de un delito concreto ("irregularidades y violaciones de las leyes vigentes"). El problema es que como en todas las purgas comunistas, algo que se tolera un día -como haber establecido bonos (o sobresueldos) como forma de aumentar la productividad en un sistema nivelado de remuneraciones- puede explotarse como un delito contra el pueblo, mañana. Y relatan que es posible que Marambio haya introducido prácticas de la economía de mercado en su empresa en Cuba. Desde hace años dejó de ser comunista en términos políticos y económicos y su vinculación con la isla era por negocios, y con Fidel Castro, afectiva.
Nuevo Acción
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