MIÉRCOLES, 05 DE FEBRERO DE 2014 00:18
Cuba actualidad, Villa Clara, Santa Clara (PD) El archipiélago cubano, ubicado en el Mar Caribe, cuenta con 242 embalses de agua dulce. 77 de ellos constituyen fuente de abasto para el consumo, según datos oficiales. Pero no toda la población recibe agua en sus domicilios cada día. Y la ausencia del vital líquido en las viviendas constituye un verdadero quebradero de cabeza.
Abel Salas, vicepresidente del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH), en comparecencia televisiva, reconoció que debido a los salideros en las redes se pierde un 58 % del agua que se bombea.
Según Antonio Rodríguez, funcionario del INRH, en el año recién concluido se destinaron 320 millones de pesos para obras relacionadas al abasto de agua y sobre todo, a la supresión de unos 250 000 salideros en redes.
La cifra está por debajo de la real.
La zona oriental se llevó el grueso de las inversiones, destacándose una obra de gran envergadura en la provincia de Holguín.
En la central provincia de Villa Clara, la situación se torna algo más difícil con el abasto de agua a la población, en especial en Santa Clara, la capital provincial, donde las redes hidráulicas tienen más de medio siglo de explotación.
El problema con el preciado líquido es bien peliaguda en este territorio, debido a la poca voluntad estatal de realizar mejoras en las deterioradas redes.
Esta ciudad está entre las cimeras de la isla en la focalidad del mosquito Aedes aegypti, trasmisor del dengue. En casi la totalidad de las viviendas existen recipientes para almacenar agua, debido a los largos períodos sin recibir el servicio, lo que repercute de forma negativa en el estado de salud de la población.
Según información oficial, la situación cambiará en este año. Directivos de Acueducto y Alcantarillado aseguraron que en el 2014 se realizarán inversiones en este sector. La inversión a realizar es grande. Requiere de esfuerzo y calidad.
Hace unos meses, cinco kilómetros de una conductora en Carretera Central banda Placetas fue sustituida. El remedio fue peor que la enfermedad. Los empates de las tuberías plásticas se deterioraban con facilidad debido al mal trabajo. Hubo que realizar la misma labor en tres ocasiones.
Actualmente en Villa Clara existen cabeceras municipales que no presentan sistema de abasto de agua. Sobresalen Ranchuelo y Quemado de Güines y un sinnúmero de poblados. Allí solo existen pozos y un gran porciento de ellos contaminados por el desbordamiento de fosas.
Ojalá que la planificada inversión en materia de abasto de agua llegue al territorio villaclareño para que sus habitantes sientan alivio en sus cabezas, atormentadas debido a la ausencia de agua en las viviendas.
Para Cuba actualidad: yoelito001973@gmail.com
Fotos: Yoel Espinosa
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