El legislador cubanoamericano llamó la atención del presidente sobre el caso del opositor Yuriet Pedroso, reportado grave tras casi dos meses sin probar alimentos. , la política de "normalización" del presidente ha envalentonado a Castro y los abusos siguen
Yuriet Pedroso se encuentra en huelga de hambre desde el pasado 2 de marzo, en protesta contra una acusación espuria de atentado.
mayo 01, 2015
El Congresista Mario Díaz-Balart (R-FL) llamó al gobierno del presidente Barack Obama a condenar los abusos contra los derechos humanos en Cuba y expresar solidaridad con el activista de la Coalición Central Opositora Yuriet Pedroso González, quien se mantiene en huelga de hambre desde principios de marzo a pesar de haber sido hospitalizado.
"El activista de derechos humanos Yuriet Pedroso González ha estado en huelga de hambre durante 60 días para protestar por su injusto encarcelamiento y por el trato inhumano. Él está gravemente enfermo en un hospital estatal en Santa Clara, Cuba. Muchos temen que no va a sobrevivir”, señala Díaz-Balart.
"La dictadura castrista se ha envalentonado por la política del presidente Obama de seguir adelante con la “normalización”, a pesar de que la brutal represión del régimen continúa. La sede en Holguín de las Damas de Blanco fue incendiada hace poco, y los arrestos por motivos políticos continúan en aumento”, agrega.
"Hago un llamado al gobierno de Obama a condenar rotundamente los graves abusos contra los derechos humanos en Cuba, y exigir que Yuriet reciba de inmediato la atención médica que necesita. El régimen de Castro tiene en sus manos la sangre de muchos inocentes, y debemos hacer todo lo posible para evitar más pérdidas de vidas", advierte el legislador por el distrito 25 de la Florida.
Pedroso González, de 34 años, declaró su huelga de hambre el 2 de marzo y fue trasladado al hospital provincial Arnaldo Milián de Santa Clarael 13 de abril. Presenta descompensación de la presión arterial, bajo ritmo cardíaco y retención de líquido. Su madre, Mavis González, asegura que no se deja tocar por los médicos.
El activista demanda que lo exoneren de un cargo de "atentado" que pesa en su contra. Su "delito" fue pegar carteles con críticas al régimen en sitios públicos del poblado de Esperanza, en Villa Clara, el 14 de diciembre de 2014.
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