From: Jesus Diaz <jvdg88@yahoo.com>
INDEPENDIENTEMENTE DE SU INCLINACIÓN POLÍTICA ......
¿ES ESTO LO QUE NADIE QUIERE ...?
La crisis existencial emergente en la frontera
Por Patrick J. Buchanan
Martes - 9 de marzo de 2021
"Entre los recién llegados a la frontera, que son transportados en autobús a los centros de detención, donde permanecen 72 horas y luego son liberados para viajar a donde deseen, muchos son portadores del coronavirus. Por lo tanto, lo que se perfila en la frontera no es solo una crisis de seguridad nacional pero una crisis de supervivencia nacional ".
Durante un debate demócrata en 2020, se preguntó a los candidatos si sus planes de atención médica cubrirían a los "inmigrantes indocumentados".
Todos levantaron la mano, incluido el favorito Joe Biden.
A partir de esa etapa, salió el mensaje: si los demócratas ganan estas elecciones, entonces es amnistía para todos y fronteras abiertas en Estados Unidos.
El mensaje fue reforzado por repetidos elogios demócratas a las ciudades santuario, por llamados a "abolir ICE" y poner fin a las deportaciones, por promesas de dejar de trabajar en el muro de Donald Trump, si no de derribarlo.
Mensaje enviado a México, Centroamérica y Tercer Mundo:
Si los demócratas ganan y usted cruza la frontera hacia los Estados Unidos, bajo el presidente Joe Biden, no lo enviarán de regreso. Después de una breve molestia, las oportunidades económicas y los beneficios de bienestar social del país más rico del mundo estarán disponibles para usted y los suyos.
Por lo tanto, cuando ganó Biden, comenzó un nuevo y potencialmente histórico aumento en la frontera sur, y el número de llegadas y cruces ilegales es de miles cada día.
Según un documento del consejo de política interna de la Casa Blanca, la cantidad de niños que, sin un padre o tutor, llegarán a la frontera en 2021 será de aproximadamente 117,000, un 50% más que el número récord de niños que llegaron en la crisis humanitaria de 2019. .
En febrero, la Patrulla Fronteriza detuvo a unos 100.000 inmigrantes por cruzar ilegalmente la frontera. "De hecho, creo que es un recuento insuficiente", dice Víctor Manjarrez Jr., ex agente de la Patrulla Fronteriza que enseña en la Universidad de Texas.
Se ha restablecido la política anterior a Trump de "atrapar y liberar".
Los niños y familias que cruzan ilegalmente desde México ahora no pueden ser retenidos por más de 72 horas. Están siendo liberados en los EE. UU. Para esperar una fecha en la corte, posiblemente años antes, para escuchar su reclamo sobre el derecho a estar aquí. La mayoría nunca se presenta.
"Estamos a semanas, tal vez incluso días, de una crisis en la frontera sur", dice el representante Henry Cuellar, un demócrata cuyo distrito de Texas colinda con México. "Nuestro país no está preparado actualmente para manejar un aumento de migrantes en medio de la pandemia".
Los demócratas del Congreso, siguiendo el ejemplo de Biden, han propuesto una nueva ley de ciudadanía. Los "soñadores", traídos aquí por sus padres cuando eran niños, serían puestos en una vía rápida de tres años hacia la ciudadanía estadounidense.
Los 11 millones a 22 millones de inmigrantes ilegales que ya se encuentran en el país (se desconoce el número exacto) serían puestos en un camino de ocho años hacia la ciudadanía.
El Partido Demócrata está firmando la mayor amnistía masiva para inmigrantes ilegales de la historia, lo que produciría millones de nuevos votantes para el partido.
Entre los recién llegados a la frontera, que son transportados en autobús a los centros de detención, donde permanecen 72 horas y luego son liberados para viajar a donde deseen, muchos son portadores del coronavirus.
Por lo tanto, lo que se perfila en la frontera no es solo una crisis de seguridad nacional, sino una crisis de supervivencia nacional. Porque es imposible ver, dadas las políticas adoptadas por la administración de Biden, cómo se puede detener la invasión de Estados Unidos. Y si 2 millones o 3 millones de migrantes llegan a la frontera de Estados Unidos y cruzan cada año, y no los enviamos de regreso, ¿qué detiene la invasión y la reconstrucción de Estados Unidos?
¿Qué presagiarían una amnistía general y una nueva invasión?
En una década, Texas, el suroeste y gran parte del sur asumirían el aspecto político de California, donde el Partido Republicano se ha convertido en un partido minoritario permanente.
Dado que muchos inmigrantes ilegales no leen, escriben o hablan inglés, y no aportan un conjunto único de habilidades, su inmensa y creciente presencia solo puede profundizar nuestra desunión nacional.
Casi todas estas personas son personas pobres o de clase trabajadora que tendrían que depender de los subsidios del gobierno para su atención médica, apoyo alimentario, vivienda y la escolarización de sus hijos.
Con la tasa de desempleo aumentando nuevamente en la comunidad negra, que ha sufrido el golpe colectivo más fuerte de la pandemia y el colapso económico, los migrantes estarían compitiendo con ellos por trabajos.
Y como los inmigrantes ilegales son desproporcionadamente jóvenes y varones, se sumarían a las crecientes tasas de criminalidad en las principales ciudades de Estados Unidos.
América se dirige, aparentemente inexorablemente, hacia un futuro en el que la mayoría de este país remonta su ascendencia a Asia, África y América Latina, un futuro en el que esta nación ya fraccionada es aún más multirracial, multiétnica, multilingüe y multicultural que hoy.
Con el conflicto racial tan agudo como lo ha sido en décadas, con nuestros partidos políticos a punta de espada, con la guerra cultural que se libra sin cesar, mientras las turbas derriban estatuas y monumentos a los fundadores de Estados Unidos, exactamente qué problema nacional será resuelto por un incansable e implacable ola de migrantes que cruzan ilegalmente la frontera hacia nuestro país año tras año?
Uno se pregunta: ¿Así termina la República?
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