El nada transparente congreso de los periodistas cubanos
MARTES, 02 DE JULIO DE 2013 03:12 ESCRITO POR OSMAR LAFFITA
Cuba actualidad, Capdevila, La Habana, (PD) Resulta chistoso que se pueda aceptar sin la menor reserva que los gobernantes cubanos, que llevan más de 50 años en el poder y que se autotitulan guardianes de todos los medios de prensa del país que dicen que "pertenecen al pueblo", vayan a permitir que los periodistas se reúnan y les digan en sus caras todo lo mal que conducen los destinos de la nación, a la que han sumido en la bancarrota.
La información que diariamente es destinada al pueblo es sometida a una rigurosa manipulación. Podan todo lo que no desean que el pueblo conozca.
Los medios oficiales, por orden de la elite gobernante, están sometidos a una censura que ejecuta de manera despreciable el Departamento Ideológico del Partido Comunista, cuyo jefe es el Torquemada de la prensa oficial, Rolando Alfonso Borges.
El 9no Congreso de la oficialista Unión de Periodistas de Cuba (UPEC) no es tan trasparente como muchos incautos se creían. En las 20 asambleas previas al evento efectuadas entre mayo y junio en las15 provincias y el municipio especial Isla de la Juventud, y en los bloques ramales (prensa escrita, radio, televisión y variado) los planteamientos y propuestas de los asistentes a estos encuentros han sido totalmente silenciados por orden del Departamento Ideológico del Partido.
Entre el 13 de mayo y el 12 de junio, los medios oficiales han brindado informaciones muy fragmentadas de estas asambleas, pero ninguna referida a lo que aconteció en las mismas. Se desconoce quiénes las presidieron, los temas que se abordaron, los que concitaron mayor atención. Seguramente se debatieron las principales deficiencias de la prensa cubanas y las vías para solucionarlas, pero ante tales cuestionamientos lo que dirigen los medios oficiales tomaron la decisión de mantenerlo todo en el más absoluto secretismo.
Es poco lo que se puede esperar de los medios oficiales porque desde que fueron confiscados y pasaron a ser propiedad del Estado sus dueños le han asignado un rol que nada tiene que ver con un periodismo que se desempeñe al margen de la política, la ideología y los poderes fácticos. Es por esa razón que en estos momentos, la prensa cubana es por sobre todas las cosas apologética, más oscura que gris.
Los dueños de esos medios no permitirán que el 9no congreso se convierta en tribuna de denuncia y cuestionamiento público de la caótica situación que atraviesa Cuba
A los asistentes a las asambleas provinciales y los que han resultados electos delegados al congreso les pondrán una camisa de fuerza.
La UPEC, surgida hace 50 años, el 15 de julio de 1963, ha dirigido siempre todas sus acciones a "la defensa de la revolución". Sus estatutos ratifican que la organización de los periodistas cubanos primeramente es revolucionaria: de eso no puede existir ninguna duda.
El congreso de la UPEC, fijado para finales de la segunda semana de julio, es un ejercicio a cumplir que según el cronograma fijado, debe celebrarse cada cinco años. Estos congresos nunca han intentado poner término al férreo control que de manera escandalosa ejerce el DIP, que es el mayor violador de los llamados del Partido Comunista para "lograr una mayor eficacia informativa".
El venidero congreso se puede encajar sin exageración en lo que se conoce como teatro del absurdo: es puro aquelarre.
Desde el año 2007, el DIP, y particularmente el Sr. Alfonso Borges, su notorio jefe, han violado y desconocido de manera escandalosa el referido acuerdo sobre el desempeño de la prensa, que señala que se debe "sancionar ejemplarmente todo intento de amordazar la crítica o el reflejo objetivo de la realidad" y concluye que "el ejercicio de la crítica es algo inherente a la actividad periodística".
Como se comprenderá, los comentarios son innecesarios. Basta con leer y oír diariamente los diferentes medios oficiales para percatarse de que su cometido informativo está muy distante de los acuerdo de las altas instancias partidistas. Resulta sumamente improbable que el 9no Congreso de la UPEC pueda dar un giro de timón de 180 grados, logre quitarle la mordaza y darle un nuevo rumbo a la maniatada prensa oficial.
Para Cuba actualidad: ramsetgandhi@yahoo.com
MARTES, 02 DE JULIO DE 2013 03:12 ESCRITO POR OSMAR LAFFITA
Cuba actualidad, Capdevila, La Habana, (PD) Resulta chistoso que se pueda aceptar sin la menor reserva que los gobernantes cubanos, que llevan más de 50 años en el poder y que se autotitulan guardianes de todos los medios de prensa del país que dicen que "pertenecen al pueblo", vayan a permitir que los periodistas se reúnan y les digan en sus caras todo lo mal que conducen los destinos de la nación, a la que han sumido en la bancarrota.
La información que diariamente es destinada al pueblo es sometida a una rigurosa manipulación. Podan todo lo que no desean que el pueblo conozca.
Los medios oficiales, por orden de la elite gobernante, están sometidos a una censura que ejecuta de manera despreciable el Departamento Ideológico del Partido Comunista, cuyo jefe es el Torquemada de la prensa oficial, Rolando Alfonso Borges.
El 9no Congreso de la oficialista Unión de Periodistas de Cuba (UPEC) no es tan trasparente como muchos incautos se creían. En las 20 asambleas previas al evento efectuadas entre mayo y junio en las15 provincias y el municipio especial Isla de la Juventud, y en los bloques ramales (prensa escrita, radio, televisión y variado) los planteamientos y propuestas de los asistentes a estos encuentros han sido totalmente silenciados por orden del Departamento Ideológico del Partido.
Entre el 13 de mayo y el 12 de junio, los medios oficiales han brindado informaciones muy fragmentadas de estas asambleas, pero ninguna referida a lo que aconteció en las mismas. Se desconoce quiénes las presidieron, los temas que se abordaron, los que concitaron mayor atención. Seguramente se debatieron las principales deficiencias de la prensa cubanas y las vías para solucionarlas, pero ante tales cuestionamientos lo que dirigen los medios oficiales tomaron la decisión de mantenerlo todo en el más absoluto secretismo.
Es poco lo que se puede esperar de los medios oficiales porque desde que fueron confiscados y pasaron a ser propiedad del Estado sus dueños le han asignado un rol que nada tiene que ver con un periodismo que se desempeñe al margen de la política, la ideología y los poderes fácticos. Es por esa razón que en estos momentos, la prensa cubana es por sobre todas las cosas apologética, más oscura que gris.
Los dueños de esos medios no permitirán que el 9no congreso se convierta en tribuna de denuncia y cuestionamiento público de la caótica situación que atraviesa Cuba
A los asistentes a las asambleas provinciales y los que han resultados electos delegados al congreso les pondrán una camisa de fuerza.
La UPEC, surgida hace 50 años, el 15 de julio de 1963, ha dirigido siempre todas sus acciones a "la defensa de la revolución". Sus estatutos ratifican que la organización de los periodistas cubanos primeramente es revolucionaria: de eso no puede existir ninguna duda.
El congreso de la UPEC, fijado para finales de la segunda semana de julio, es un ejercicio a cumplir que según el cronograma fijado, debe celebrarse cada cinco años. Estos congresos nunca han intentado poner término al férreo control que de manera escandalosa ejerce el DIP, que es el mayor violador de los llamados del Partido Comunista para "lograr una mayor eficacia informativa".
El venidero congreso se puede encajar sin exageración en lo que se conoce como teatro del absurdo: es puro aquelarre.
Desde el año 2007, el DIP, y particularmente el Sr. Alfonso Borges, su notorio jefe, han violado y desconocido de manera escandalosa el referido acuerdo sobre el desempeño de la prensa, que señala que se debe "sancionar ejemplarmente todo intento de amordazar la crítica o el reflejo objetivo de la realidad" y concluye que "el ejercicio de la crítica es algo inherente a la actividad periodística".
Como se comprenderá, los comentarios son innecesarios. Basta con leer y oír diariamente los diferentes medios oficiales para percatarse de que su cometido informativo está muy distante de los acuerdo de las altas instancias partidistas. Resulta sumamente improbable que el 9no Congreso de la UPEC pueda dar un giro de timón de 180 grados, logre quitarle la mordaza y darle un nuevo rumbo a la maniatada prensa oficial.
Para Cuba actualidad: ramsetgandhi@yahoo.com
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