Por Manuel Aguirre Lavarrere (Mackandal)
Cobarde ha de ser quien por temor no satisfaga
la necesidad de su conciencia.
José Martí
Guanajay, Provincia Habana,(PD) La recién finalizada Cumbre de Indígenas y Afrodescendientes, celebrada en Otavalo, Ecuador, auspiciada por el ALBA, deja al afrocubano la triste experiencia de continuar paria en su propia tierra debido al inmovilismo político.
El gobierno cubano estuvo representado esta vez por el vicepresidente Esteban Lazo, uno de los hombres confiables del régimen y militante activo de la línea dura del comunismo a la cubana.
De Cuba hacia fuera se habla de médicos internacionalistas y de la Operación Milagro. De Cuba para adentro el negro sigue con las mismas carencias que tuvo antes y después del atraco de los comunistas al poder, con algún que otro tinte apaciguador, que ante los ojos de los asistentes a la magna cita y otros dignatarios del mundo, cree la sensación de un estado de justicia y equidad.
Pero hay que poner distancia entre la ficción de lo que se dice y la realidad que se vive en la Isla: el desdén por la opinión diferente, las constantes violaciones a los más elementales derechos de la ciudadanía y la indiferencia por el mejoramiento de las condiciones de vida de su pueblo.
Un gobierno goza de credibilidad cuando las esperanzas, las ansias de justicia y la opinión ciudadana están por encima de los intereses gubernamentales. Y estos conceptos sólo emanan de la sociedad civil con sus múltiples formas y pensamientos.
La intervención del representante cubano a la cita de Otavalo debe despertar la sospecha cuando es evidente que los móviles que barajan los conceptos básicos para el cuajo definitivo de una sociedad feliz y en paz consigo misma, están trocados.
El representante del gobierno cubano en Otavalo no habló del acoso que durante dos días sufrió la Primera Asamblea Independiente de los Afrodescendientes Cubanos, de la muerte del opositor Orlando Zapata Tamayo hace apenas unos meses, de la huelga de hambre del periodista independiente Guillermo Fariñas, de los tres jóvenes negros fusilados en el 2003, del permanente y abusivo hostigamiento que sufren a diario miles de negros en Cuba por parte de la policía, del aumento de la pobreza y la desnutrición dentro de la población negra cubana, de las golpizas en las prisiones.
Esos problemas sólo podrían ser planteados por alguien que piense alto, sienta hondo, y hable claro, cualidades todas que están muy lejos de tener este o cualquiera que sea el enviado del actual régimen.
Jamás obtendrá el negro en Cuba la anuencia a su mejoramiento ciudadano ni vivirá en paz la sociedad cubana, mientras que tenga que respirar por los pulmones de una tuberculosa tiranía.
makandalmm@yahoo.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario