Por Osmar Laffita Rojas
Capdevila, La Habana,(PD) En los primeros días de agosto la prensa del gobierno cubano ha reflejado minuciosamente el desempleo en la Unión Europea y los Estados Unidos. Sin duda, es el problema más grave que afecta las economías de estos países. El desempleo ya alcanza el 12% en la Eurozona. También se destaca el bajo crecimiento, la crisis de la deuda y la incertidumbre sobre el Estado del sistema bancario.
En Alemania, la locomotora de la economía europea, el desempleo rebasa el 7%. Algo similar ocurre en Francia, donde está cerca del 10% y en España, con la alarmante cifra del 20%. Pero a pesar de lo grave de la situación, todos los parados reciben un subsidio, lo cual en parte alivia la precariedad en que se encuentran
En los Estados Unidos, se reportó al cierre de julio un desempleo de un l9.5%. En ese mes se perdieron 221 000 puestos de trabajo en el sector gubernamental. Pero nadie quedó desamparado debido que todos reciben subsidio de desempleo.
Al cierre del semestre, el crecimiento de la economía norteamericana no fue el que se esperaba. Solo se crearon 100 000 nuevos puestos de trabajo por mes, una cifra que no ha sido significativa para reducir la alta tasa de parados.
Ahora, ¿cómo se ha comportado la situación del desempleo en Cuba? Continúa siendo un gran misterio. La prensa oficial no informa nada al respecto, pero se sabe que más de un millón de trabajadores sobran en los diferentes sectores de la economía cubana.
De la fantasmal plena ocupación de 4 millones de trabajadores, dicha cifra de desocupados representa el 20% de la fuerza laboral.
En la actividad agrícola, el 34% de la fuerza laboral está ubicada en actividades improductivas. Solamente el 8% esta directamente en la dura brega de hacer producir la tierra. Algo similar ocurre en el sector de la salud, en el que más 34 000 trabajadores tendrán que ser reubicados en otras actividades. En el turismo sobran 30 000 trabajadores.
Ante el estancamiento de las principales ramas de la economía y la ausencia de inversiones, el gobierno se baja con la infausta noticia de que está obligado aplicar severas medidas de ajustes, típicas de las terapias de choques, con las que se eliminaran de una vez todos los enfoques paternalistas. Ya no se continuará con los gastos improductivos, reflejados en los pagos igualitarios. Es decir, que se fue a bolina la garantía salarial que durante años disfrutaron los trabajadores cubanos.
En este semestre no se crearon nuevos empleos. Como consecuencia de las plantillas infladas, miles de trabajadores en la práctica están sumidos en una vagancia autorizada que provoca corrupción e indisciplina laboral generalizada.
El Presidente Raúl Castro ha reconocido públicamente que Cuba es uno de los pocos países en que miles de personas viven de manera holgada sin trabajar. Una muestra de la nefasta y destructiva política laboral aplicada por los actuales gobernantes cubanos.
ramsetgandhi@yahoo.com
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