jueves, 29 de noviembre de 2012

Un accidente doblemente triste
Amarilis C. Rey
accidente1Cuba actualidad, Managua, La Habana, (PD). En la mañana del pasado 12 de noviembre, un nuevo accidente de tránsito cobró la vida de tres personas, entre ellas la de una pequeña de apenas un año y seis meses.
La tragedia ocurrió en la localidad de Las Guásimas, en el municipio Arroyo Naranjo, cuando se encontraron en una curva peligrosa un Chevrolet del año 51, donde viajaban las víctimas, y un camión de carga Kamaz
Una joven madre de 17 años que cargaba a su pequeña y dos hombres más viajaban en el asiento trasero, mientras el padre de la niña, de 24 años, acompañaba al chofer en la parte delantera.
Según la versión de uno de los sobrevivientes, con el impacto la bebé se le fue a la madre de sus brazos y se golpeó la cabeza con el timón del vehículo. Asegura que el padre en un intento por proteger a su hija, quedó desvalido junto al chofer en el mismo centro de la colisión.
Otros testigos que presenciaron la escena contaron como el neumático delantero derecho se desprendió del auto al caer en un bache existente en la vía cuando el chofer trataba de separarse lo más posible del camión que, al parecer, transitaba a exceso de velocidad.
Las muertes ocurrieron de forma escalonada. El padre de la infante, en el momento del accidente; el conductor quedó muy mal herido y falleció ese mismo día a las 5 de la tarde, y la niña dos días después. Por ese motivo, la funeraria de Managua, ubicada a pocos kilómetros de lugar de los hechos, estuvo colmada durante tres días por gran parte de la vecindad, que mostraba su pesar ante el fatal acontecimiento.
Pero sin lugar a dudas, el más triste fue el velorio de la niña, cuyo cadáver demoró varias horas en llegar a la funeraria. Según comentaron algunos familiares, el motivo de la tardanza fue que debieron traer el ataúd, con las características que requería, de la provincia de Matanzas.
El auto en que perdieron la vida estas personas funcionaba como taxi colectivo, cubriendo la ruta entre Managua y el Reparto Eléctrico, y su chofer tenía el correspondiente permiso para realizar esta actividad.accidente2
Hace algunos meses, dicho chofer comentó a esta periodista, el motivo principal por el que continuaba trabajando después de muchos años de desmovilizarse de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR), donde había sido oficial.
"Tengo un par de jimaguas, de 13 años. Y tengo que seguir trabajando pues hay que vestirlas y calzarlas y con mi pensión, no me alcanza, pues todo está muy caro, y además se acercan sus quince, y cualquier cosa cuesta una barbaridad", me explicó.
En la opinión de otro taxista, su colega no corría y manejaba con mucha precaución. "Para mi punto de vista, el problema fue el hueco en la vía. Estos son carros viejos, con mil soldaduras y adaptaciones, y al hundirse en el bache se parte el eje delantero, lo que origina el accidente", dijo.
Varias son las versiones sobre lo que pudo haber pasado aquella mañana. Aún no se conoce ningún informe oficial al respecto.
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Foto; Amarilis C. Rey

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