La bloguera no cree “que el flujo migratorio se haya detenido ni se vaya a detener, porque sencillamente depende de la calamitosa situación socioeconómica y política que hay dentro de Cuba”
La bloguera independiente Miriam Celaya considera que el anuncio en la Gaceta Oficial de Cuba del decreto ley número 302 del Consejo de Estado, que reforma la vigente Ley de Migración, es “otro sueño roto para los ilusos que creyeron que habría verdaderamente reformas migratorias”.
Celaya, quien fue entrevistada por Tomás Cardoso en el programa de Radio Martí, Cuba al Día, dijo que ella siempre ha dicho que el Gobierno de Cuba “dejará de ser, el día que verdaderamente haya transformaciones en las leyes migratorias, y verdaderas transformaciones en el tema de libertad de expresión y de prensa”.
Cuando le preguntaron a Celaya si ella creía que esta medida iba a incrementar el flujo migratorio hacia Estados Unidos, respondió:
“Yo no creo que el flujo migratorio se haya detenido ni se vaya a detener, porque sencillamente depende de la calamitosa situación socioeconómica y política que hay dentro de Cuba, y va a continuar por supuesto, porque es que estas leyes no favorecen nada, pero también dependía de esta situación de que haya una visa de un país receptor”.
La reforma migratoria elimina los permisos de salida para viajar al extranjero y deja sin efecto el requisito de la carta de invitación.
Celaya, quien fue entrevistada por Tomás Cardoso en el programa de Radio Martí, Cuba al Día, dijo que ella siempre ha dicho que el Gobierno de Cuba “dejará de ser, el día que verdaderamente haya transformaciones en las leyes migratorias, y verdaderas transformaciones en el tema de libertad de expresión y de prensa”.
Cuando le preguntaron a Celaya si ella creía que esta medida iba a incrementar el flujo migratorio hacia Estados Unidos, respondió:
“Yo no creo que el flujo migratorio se haya detenido ni se vaya a detener, porque sencillamente depende de la calamitosa situación socioeconómica y política que hay dentro de Cuba, y va a continuar por supuesto, porque es que estas leyes no favorecen nada, pero también dependía de esta situación de que haya una visa de un país receptor”.
La reforma migratoria elimina los permisos de salida para viajar al extranjero y deja sin efecto el requisito de la carta de invitación.
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